¿Sabes? todo hay que sentirlo, notarlo, palparlo en lo más profundo de tu ser...

sábado, 25 de enero de 2014

No es cochino, es sagrado.

Me removió por dentro, me revolvió y me puso patas arriba. Recuerdo que me quedé KO por un instante, asi como boquiabierta y enrabiatada. Se me cortó la respiración, cómo semejante afirmación podía haberme hecho temblar.

No soy muy de alarmarme antes de tiempo, prefiero tomarme algo de margen para reflexionar, pero fué la claridad de sus palabras lo que me hicieron pensar; no hace mucho escuché de boca de una desconocida una verdad como un templo, que me llegó al alma y me hizo sacar los dientes "la masturbación femenina es un tema tabú entre las mujeres de españa" y quizás toda la mala leche que surgió, efimeramente, fué porque esa afirmación esconde una gran parte de realidad: la mujer, aquí de donde soy yo (con su sol, sus cielos azules, con sus oleajes salvajes al norte...) sigue un poco escondida en si misma, tanto es así que apenas se permite hablar con naturalidad de algo tan normal como tocarse.


Imagen: Caroline Westerhout
La tranquilidad de aquella mujer, hasta me dio miedo y casi peor fué ver como ella se negaba una y otra vez a que disfrutaría consigo misma porque eso es algo inapropiado.

Quizás es que difiero del concepto "inapropiado", pero no considero inapropiado que una mujer disfrute consigo misma y lo comparta con su circulo más allegado si quiere, sin embargo, en caso de necesitar conservarlo en la intimidad también puede hacerlo pero ya por el simple hecho de dar un paso consigo misma le quita parte del peso de "tabú" que tan arraigado tiene.

¿Por qué los penes si pueden disfrutar de caricias en la intimidad, caricias de su propio cuerpo, de su propia piel? ¿Por qué tan reservado es poder acariciar con amor tu propia vagina? ¿Por qué es tan criticado? Hay tanta gente queda anonadada cuando lee en un mismo párrafo "maturbación femenina, vagina, caricias, humedad" y sin embargo si viesen la otra parte de la palabra, más allá del significado que le damos, la calidez de la palabra que podría interpretarse como "pasión de mujer, flores, sensualidad, me amo"; las primeras que debemos cambiar el concepto que se tiene sobre la masturbación femenina somos las mujeres.

Cuando una mujer se toca, disfruta consigo misma, aumenta su autoestima, su estado de ánimo, aumenta su vibración, su amor por si misma, se sonrojan las mejillas, aumentan sus glóbulos rojos, se vuelve más tersa su piel, ayuda a los músculos de la vagina, ayuda al PH de la vagina, se contribuye a oxigenar el cuerpo, los poros de la piel se abren y la piel elimina toxinas... cuando una mujer se toca, se centra en si misma, es como una sagrada meditación donde puede sentir las pulsaciones de su corazón y cada centímetro de su piel se vuelve extremadamente sensible, sus pupilas se agrandan, sus oidos se centran en escuchar sus propios y tímidos gemidos, su respiración se profundiza con lo cual se contribuye a la capacidad respiratoria puesto que se ejercitan los pulmones, su boca segrega más saliva y ésta se renueva ayudando al PH de la boca y evitando la acumulación de bacterias... cuando una mujer se permite amarse a si misma de ésta manera tan básica y tan pura, es capaz de escuchar La Tierra cada uno de sus pasos, de sus palabras, de sus pensamientos... y es capaz de ver hasta donde llegan las raíces del cuerpo de una mujer.

"Ella desabrochó los botones de su ajustado pantalón, deslizó la mano por su piel, bajando lentamente desde su ombligo, dejando que la yema de sus dedos le hiciesen cosquillas, suspiró hondamente al sentir su piel ponerse de gallina..." Y dejemos que siga disfrutando tranquilamente y en soledad que para eso está ella solita, si no, ya habría buscado compañía.

2 comentarios:

  1. Gracias al Universo que encontré tu blog!!!! Mil gracias!!!!!

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    1. Gracias a ti.

      Un abrazo!! (aún tengo que mejorar mucho escribiendo pero me alegra que te llene lo que ya tengo publicado)

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