Trenzar a mi demonio:

(Mi mejor amigo me ha hecho prometerle que tomaré mejores decisiones...)

Hay una oscuridad que me habita

Que destruye todo lo que toca...

Que me mata y debilita. 

Hay una sombra que me conquista...

Que es fuego del que asesina...

Furia y arrebato sin cadenas...

Pura embestida. 

Y aunque yo la trenzo...

Siento que de nuevo ese diablo...

Me hace sentir que está todo mal

Que lo hago mal

Que sale todo mal...

Se destrenza y sale embarrando

Todo lo que es tierno, sensible, blando...

Hay un demonio que me empuja

Que es una verdad y es un motivo

Que es un recuerdo, que es un patrón

Que es cobijo de lo cómodo

Un viejo conocido... 

Que destruye todo con solo un brinco...

Y con esa sombra

Que me hiere y que me pesa

Que me clava una condena

De pura pena envenenada...

Vivo cada día en el más 

Profundo silencio y soledad. 

Y este ser, que forma parte de mi

Despierta otros seres con su presencia...

Y los demonios, las sombras...

Se alzan entre espejos 

Haciéndose señas y reflejos... 

Levantándose y mostrando su existencia. 

Todos nuestros demonios

Despiertan los demonios del prójimo...

Y entre tanto ellos 

Hacen el amor en sus infiernos...

Y nosotros no podemos ni besarnos

En la comisura de los labios...

En esto que llamamos Tierra y Vida...

Pero que  a veces resulta un gélido invierno

Que no termina. 

Hay un demonio que me puede

Que me vence, que me obliga...

Hay un demonio que vive en mi...

Pero no huyas muy lejos...

Tú también tienes otro encima.