¿Sabes? todo hay que sentirlo, notarlo, palparlo en lo más profundo de tu ser...

martes, 10 de abril de 2018

Liberarnos del miedo a lo diferente:


Los seres humanos podemos actuar a través del miedo y muchos de esos actos pueden ser de rabia, descontrol, enfado, agresividad... Llevándonos a una conducta hiriente y destructiva. Aunque esto es un hecho que cuando uno siente miedo puede convertirse en alguien agresivo, borde, tosco... llegando incluso a la violencia, es algo que no puede ni debe servirnos como justificación.

Precisamente ese desconocimiento es lo que lleva a las sociedades que no están "abiertas" a ser agresivas con personas que se salen de lo establecido. Otras formas de sentir, amar, ver la vida, vivir, compartir, trabajar... Otras estructuras de familia, rutinas, hábitos en el hogar... Pueden ser vistos desde el miedo y ese miedo puede empujar a otras personas a atacar la libertad de aquellos que hacen las cosas a su manera y sin meterse con nadie, y todo porque hay un pánico a lo diferente. Hay cierto terror a que lo diferente sea lo común, a que el vecino pueda venir a influirte hasta tal punto que eso te afecte... Y por si esto fuese poco, ese miedo a lo diferente se puede ver incluso de personas a otras personas por enfermedades físicas o mentales.

Liberarnos del miedo nos concede una poderosa oportunidad de crear y habitar en una sociedad con mayor apertura, con mayor capacidad de comprensión y entendimiento. Liberarnos del miedo nos libera de los prejuicios, porque muchos de esos miedos que no son más que ignorancias multiplicadas, vienen acompañadas de prejuicios, ideas preconcebidas, suposiciones sin fundamento, teorías arcaicas, pensamientos antiguos y desactualizados... Fuentes que estancan la mente humana, el sentir humano y la evolución humana. Fuentes que no se presentan en el momento actual, con las necesidades de la sociedad actual y la evolución de todo lo que hemos creado hasta ahora.

Liberarnos del miedo a lo diferente nos aporta la libertad que merecemos para poder ser, actuar, sentir, crear, amar, construir, compartir... Como realmente sentimos. Nos da una hermosa oportunidad para encontrar aquello que realmente encaja en armonía con nuestras emociones y pensamientos, pudiendo así establecernos en una vida a la medida de lo que queremos y de lo que nos merecemos.

Muchas personas tienen miedo a lo diferente, aunque esa "diferencia" suponga el bienestar para el prójimo. Porque parece que no importa apenas nada cómo se sienten los demás, sólo importa entrar dentro de esos márgenes castradores de normalidad establecidos por una perspectiva enfermiza de lo que sí debe ser y de lo que no debe ser. Las naciones más autoritarias se han encargado a lo largo de la historia de la humanidad en establecer qué está bien y qué no, juzgando, matando y humillando a aquellos que querían y necesitaban expresar sus emociones desde otra forma. Otros muchos sistemas de gobierno han ido incluso más lejos, juzgando y condenando incluso a personas con enfermedades, algo que en pleno S XXI nos parecería lo que es: una barbaridad. Sin embargo parece que en los tiempos que corren vivimos en cierta "ambivalencia hipócrita" pues somos capaces de criticar las conductas de grandes poderes que establecen lo "normal" como algo "sano" y sin embargo no estamos lo suficientemente abiertos para comprender que lo más sano es que cada uno haga con su vida lo que crea conveniente, siempre y cuando no dañe a otras personas para ello.

Pensamos que ya hemos avanzado mucho y que por eso no hay que seguir trabajando para seguir avanzando, pero sólo os diré una cosa: bajo muchas caretas que vemos a diario, sigue encontrándose el patrón del miedo a lo diferente. Las personas juzgan a otras personas por lo que hacen dentro del libre albedrío de su vida, aunque esas cosas que hagan no supongan ningún mal para nadie. Las personas siguen juzgando a otros por cómo se ven, incluso a personas con discapacidades. Las personas siguen sin comprender los tiempos de los demás, las necesidades de los demás y parece que todo se establece en base a una única perspectiva absoluta.

Pensamos que en los países denominados "desarrollados" no queda apenas nada por hacer, pero no es cierto, tenemos que estar a la altura de lo que se nos pide, de lo que nos merecemos como sociedad, como pueblo, como humanidad... Y esa "altura" que merecemos y podemos alcanzar es la de liberarnos del miedo a aquello que se sale de lo común, de lo usual, de lo corriente, de lo normal, de lo ordinario, porque precisamente ese concepto de "normalidad" no es más que algo a lo que nos hemos acostumbrado porque es lo más general, lo que se establece a través de un colectivo más grande, pero la "normalidad" no es más que una falsa realidad inventada por la perspectiva humana. Qué es normal o no, puede emerger en base a los juicios, educación, perspectiva... De cada persona. En base a las influencias y a las oportunidades que se ha dado a si mismo.

Es el miedo a lo diferente lo que impide a las personas ser abiertas y experimentar la vida sin ninguna idea ya establecida. El miedo a lo diferente coarta la libertad y el corazón de los que viven con él y también hacia aquellos contra quienes lo proyectan. El miedo a lo diferente alimenta el odio, vuelve irrespetuosa a las personas, las condiciona haciendo emerger lo peor de si mismas.

El miedo a lo diferente impide ver a personas distintas con la autonomía y libertad que se merecen. El miedo a lo diferente impide a las personas explorarse a si mismas y concederse la oportunidad de saber qué sienten, quienes son, cómo se encuentran... El miedo a lo diferente es una de las fuentes por las que ha emergido el odio contra los demás, contra homosexuales por ejemplo o contra otras formas de vida, estructuras familiares o estructuras de pareja.

El miedo a lo diferente también genera envidias, porque quien vive con el miedo no se atreve mientras juzga y critica a los demás pero a la vez siente cierto anhelo al ver que otros disfrutan de su libertad y construyen oportunidades nuevas en su vida y disfrutan de ellas.

Liberarnos a nosotros mismos del miedo a lo diferente nos concede la oportunidad de construir una realidad en armonía con lo más puro de nosotros: la libertad, el amor, el respeto y la comprensión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario