El pasado está pasado y seguro, segurísimo, que hay mucho dolor y sufrimiento en tu propio pasado, como en el de todas las personas que conozco. Todo lo que has vivido que parecía inevitable, era precisamente inevitable, pero porque todo te ha llevado a este momento.
Sé que en los instantes crudos es difícil recordar quién es uno, qué ha recorrido, cuál es el objetivo, cuál es la fuerza que le acompaña, cuáles son sus herramientas y sus armas frente a la adversidad... Lo sé porque también me ocurre, soy tan humana como cualquier otra persona, pero por eso he decidido escribir esto, para que juntos agradezcamos en el instante que se está dando ahora, algo sagrado que viene de un pasado y de una cantidad de registros muy importantes donde todo tu ser ha aprendido y se ha visto forzado a cambiar. Y en ese ímpetu y empuje por el cambio, había una frecuencia que necesitaba mostrarse en lo que ahora es "tu momento presente".
Se dice que si fuésemos capaces de retroceder en el tiempo, como una máquina que nos llevase el pasado, podríamos crear una gran catástrofe. Cierta teoría comenta que si nosotros cambiásemos incluso los más mínimos detalles, los acontecimientos que se darían en el futuro no serían igual que los que se han dado... Y es que hay una relación muy estrecha entre cada vivencia, cada segundo, cada aprendizaje, cada detalle... Es algo que muchas veces resulta tan sutil que nos cuesta apreciarlo con objetividad, pero está ahí, existe.
Poco a poco has ido avanzando y despojándote de determinados pesos y corazas, poco a poco te has liberado de lo que te impedía, de lo que te resultaba una carga, de lo que no salía, de lo que te contaminaba, de lo que te restaba o de lo que te quitaba paz. Con ésto no quiero decir que ahora no existan cosas que te puedan afectar o que te estén afectando, creo que posiblemente siempre existirán cosas de ese tipo, sin embargo pueden ser cosas relacionadas con otros temas diferentes... Es posible que sientas que ya has aprendido lecciones y que por ser buen aprendiz y alumno el universo ha tomado la decisión y la iniciativa de no tener que volver a repetirte esa materia y con ese asunto ya has pasado de curso.
Uno no progresa de la noche a la mañana, normalmente uno no logra todos sus objetivos ni sus metas de la noche a la mañana, uno no aprende de la noche a la mañana, uno no madura de la noche a la mañana, uno no crece de la noche a la mañana, uno no es más sabio de la noche a la mañana... Porque no existen apenas cosas en el mundo que se den de la noche a la mañana. No es lo más frecuente, no es lo común y no es lo habitual. De ésta manera el propio cosmos, la vida, la humanidad, el universo, la espiritualidad, el desarrollo como individuos... Nos demuestra que muchísimas cosas, herramientas, habilidades, capacidades, cambios... Requieren de un proceso que va "poco a poco" y que acelerar ese proceso puede llevar todo a un catastrófico e irrevocable final, una ruptura, un estallido, algo que finalmente no se da, una pérdida... Paciencia y confianza, dos grandes habilidades humanas que de lo grandes que son resulta a veces harto complejo encarar e integrar, reconocer y convertir como hábito.
Poco a poco has dejado atrás el pasado y ese pasado ya no es éste presente y deberías, te mereces, darte la enhorabuena por ello. Poco a poco has comprendido que el amor, por ejemplo, es algo que te mereces y que quien honra al amor necesita hacerlo primero con uno mismo... Y que el amor florece con más ganas, vive mejor y da mejores frutos en un ambiente sano. Todas esas rupturas te enseñaron lo que no necesitas, lo que no quieres, lo que no mereces... Y todo ese dolor te ha aclarado la cabeza y te ha hecho dar un paso decisivo: priorizar por el bienestar de tu sentir y de tu corazón. Así, siendo valiente y poniendo al corazón en una situación privilegiada te abres a un mejor amor, porque te curas tú contigo y esa sanación atrae a personas que también se han curado consigo. Hay una fuerte conexión, una frecuencia o vibración que hace que esas energías con esas materias ya aprendidas terminen por encontrarse. Pero para eso hay que ser tremendamente humilde con uno mismo y admitir tus peores cosas para transformarlas, sin hacer sentir culpable a nadie.
Poco a poco... El proceso que he comentado es bonito y se da, existe, en muchas vidas que nos rodean, pero no es algo que surja de la noche a la mañana. Así como la enfermera no es enfermera de la noche a la mañana, ni el profesor tiene sabiduría de transmisión de la noche a la mañana. Igual ocurre con el mundo de las emociones, del sentir, del desarrollo y del despertar.
Poco a poco has ido dejando atrás miedos, experiencias duras, crudezas... Que te han dado más capacidad para valorar con objetividad lo que realmente tiene, valga la redundancia, "un valor incalculable". Poco a poco todo se ha ido dando para que aprendas a volar, a soltar las alas, a ir hacia delante, a no rendirte... Poco a poco todo se ha ido dando para que ganes más dinero, para que vivas independiente, para que tengas hijos, para que viajes por el mundo, para que disfrutases aquel evento, para que te atrevieses a organizar algún espectáculo... Y para que poco a poco otras situaciones se den, para favorecer el florecimiento de todo lo que necesita de paciencia, fé y tiempo, te recomiendo que conforme avances vayas permitiendo una apertura mayor, también poco a poco.
No estarás abierto de par en par así a la primera, eso te lo aseguro, pero que las cosas que tanto te dolieron del pasado no se conviertan en justificación y excusa para impedirte uno de los mayores placeres como seres humanos: vivir con la intención de la plenitud, por encima del dolor, del anhelo, del sufrimiento y de la resistencia. Si poco a poco has ido soltándote de esa historia del pasado, quiere decir que puedes hacer cualquier cosa que necesites también poco a poco.
Porque los mejores postres se hacen poco a poco y a fuego lento. Los mejores guisos se cocinan poco a poco, las mejores metas se saborean poco a poco, las mejores carreras se logran poco a poco... Porque el poco a poco te permite centrarte, si lo tomas de forma objetiva y saludable, ya que quien mucho abarca poco aprieta.
Porque uno mejora poco a poco. Uno se recupera físicamente poco a poco, una fractura mejora poco a poco y posteriormente la rehabilitación para aportarte tu naturalidad también es poco a poco. Uno aprende a cantar poco a poco, uno se vuelve un maestro de la guitarra poco a poco, uno convierte una habilidad en un hábito poco a poco, porque poco a poco te sumerges en mejores rutinas, porque uno va amando poco a poco (hasta que ese poco a poco se convierte en un mucho).
Así que no está mal, cuando alguien te pregunte "¿cómo vas? ¿qué tal aquel tema?" y tú inconscientemente respondas "poco a poco" podrás ser testigo de la vibración en la que avanza el propio universo para mostrarte que las cosas importantes no se pueden abordar y reestructurar de "a una".
Y ahora, que estamos en éste presente dime... ¿qué has sentido que poco a poco ha ido cambiando y ahora ya es algo completamente diferente? ¿qué habilidades te ha aportado el "poco a poco" vivido hasta ahora? ¿sientes entonces que la vida se da también "poco a poco"?.
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